La histórica unidad
«Nosotros armamos la lista en septiembre del año pasado, porque las elecciones estaban previstas para octubre, postergadas, obviamente, por la pandemia. Y fue muy bueno lograr la conformación de una lista única. Llegar a esa unidad fue un caso, diría, que histórico».
Reclamo de la sociedad
«Lo tomamos como un reclamo de la sociedad, nos decían que debíamos ir todos juntos. Hay una especie de cansancio de la gente de ver a uno contra otro, de ver esa grieta. Quería una oposición que esté sólida. Ese fue el primer paso, nada fácil lograr la unidad. Se disputan cargos porque quien está en política siempre disputa espacios de poder».
Fortalecer la UCR dentro
de Juntos por el Cambio
«La verdad es que me entusiasmé con la idea de presidir el Comité, ya que mí nombre surgió de los dos lugares, lo que sería un elogio para mí persona. Durante el camino que recorrimos durante la pandemia, dejamos un mensaje esperanzador, tanto yo como quienes me acompañan en la lista, como Amadeo Montenegro, quien me acompaña como vice, Mabel Andrada, la secretaria, que es el de fortalecer la Unión Cívica Radical, dentro del espacio que es Juntos por el Cambio, alianza que se forjó en Gualeguaychú, por una decisión de la Convención Nacional y nosotros somos un partido orgánico y democrático, que cada dos años vamos a elecciones, competimos en internas, proponemos dirigentes».
Alianza electoral, no de
gobierno El necesario replanteo
«Es cierto que a parir de ese momento, el territorio lo puso el partido, además de su historia y sus hombres y mujeres, pero hay que ver las cosas en el contexto del 2015. Cuando vamos a la alianza, pensábamos que iba a ser de gobierno y no únicamente electoral como finalmente fue. También competimos en las PASO donde llevamos como candidato a Ernesto Sanz, compitiendo con Mauricio Macri y «Lilita» Carrió. Lo cierto es que Sanz sacó el 6% frente a Macri que llegó al 56/57%. Nos ganaron la interna y eso marcó la tendencia. Nosotros seguimos «adentro», con la aspiración que se transforme en una verdadera alianza de gobierno que hasta ahora no lo fue. Terminamos siendo furgón de cola sin tomar parte en las decisiones que entiendo, es un tema que el radicalismo, necesariamente, se debe replantear, sobre todo en cuestiones económicas».
Volver a las bases para
fortalecer el Partido
«Hay que volver a recrear el radicalismo, fortalecerlo. Lo que noté es que en la sociedad ha mucho vestigio radical, de aquel nostálgico del 83, de los alfonsinistas, que después se fueron perdiendo, inclusive con muchos yéndose del partido porque no estuvieron de acuerdo con la Alianza que se conformó en Gualeguaychú con Mauricio Macri y tampoco con su gobierno. Me parece que ahora, lo que se que se está planteando desde ese lugar, después de haber transitado por esa experiencia, es volver a esas bases radicales para fortalecer a la Unión Cívica Radical».
Volver a ser protagonistas
«Y la verdad es que salimos a la cancha con esa impronta, no solamente acá, sino también en el espacio que nosotros apoyamos, que fue el de Maximiliano Abad, Diputado Provincial que tomó esa impronta. Abad está bastante vinculado a Juntos por el Cambio, con gente que lo acompaña como Gastón Manes, Facundo Manes, María Luisa Storani, Andrés Malamud, un gran intelectual que puede hacer aportes importantes. Me da la sensación que se puede reconstruir el radicalismo con esos valores que se han ido desdibujando: Ha llegado el momento que el radicalismo retome la ofensiva y vuelva a tener el protagonismo que siempre tuvo».
Puertas abiertas
«Tenemos que hacer un gran trabajo a nivel local que tiene que empezar con abrir las puertas del Comité y también salir a la calle. Empezar a comprender que hay que salir a la calle a ver lo que la gente necesita, como lo supo hacer Raúl Alfonsín en el 83».
Los candidatos provincia
les y su peso en Gesell
«La precepción que tuve en la calle es que Posse es un nombre muy conocido, ya que Gustavo, la segunda generación, sigue gobernando San Isidro después de los mandatos de Melchor, que comenzaron en 1983. Abad no es muy conocido, a pesar de ser Diputado Provincial y de su cercanía, ya que es de Mar del Plata. Eso inclinó bastante la balanza. A nivel local quienes apoyaron la lista de Posse lo hicieron saber desde el primer momento. «Tony» Marchiolo es «possista» desde siempre, viene de San Isidro, inclusive su hermano trabaja con Posse. Y Luís Herrera, que se sumó a «Tony» hizo su trabajo, pero, también hay que resaltar que Herrera forma parte de la Lista de Unidad. En Gesell triunfó la lista de Abad por una diferencia de 70 votos».
Buena convocatoria
«Hubo una gran movilización a nivel provincial. Más de 100.000 afiliados concurrieron a votar y a nivel local, votaron exactamente 539 afiliados, lo que nos sorprendió gratamente. Nosotros nos dábamos por satisfechos con 400 Es bueno que el radicalismo se movilice. Tenemos un padrón de 2675 afiliados pero con un padrón en el que hay muchos adultos mayores, que cuando los íbamos a ver nos manifestaban su apoyo pero también su temor por concurrir a un espacio en el que iba a haber mucha gente».
Búsqueda de diálogo
«Siempre buscamos el diálogo y el consenso con el oficialismo. Yo participé activamente en el proceso de elaboración del Código de Ordenamiento Urbano junto a un grupo de profesionales muy reconocidos en la ciudad, los cuales, en algún momento también pasaron por la función pública. Intentamos acercarnos para colaborar, pedimos varias reuniones con el intendente Barrera. También buscamos el diálogo desde el partido, cuando estábamos en duda si se abría o no la temporada. Teníamos una propuesta de 8 puntos que creíamos eran importantes, que debían ser tenidos en cuenta y desarrollados para trabajar de manera conjunta para que la apertura sea sostenible. Siempre tuvimos la intensión de poder acercarnos y todavía conservamos la esperanza de poder hacerlo, porque no solo le hará bien a la política sino también a todos los geselinos. Hay que lograr achicar algunas grietas, ese es, estoy segura, un reclamo general».
El funcionamiento del
Concejo Deliberante
«No tuvimos respuestas del Gobierno y ni hablar de lo que pasa en el Concejo Deliberante, donde la aplicación de «la mayoría automática» se trasformó en un abuso, en la dictadura del número cuando puede la Presidencia desempatar, cuando debería ser al revés: usar esa mayoría para buscar el consenso. Pero no les interesa. La prueba más cercana que tuvimos fue la aprobación del COU, que sin tiempo para que se debata, el oficialismo lo trató y aprobó sobre tablas, cuando es el instrumento que determinará el destino de Villa Gesell en los próximos años. Estas y otras cuestiones tratadas de esta manera le hacen mucho daño, no solo a la política sino también a la sociedad en general, que ve que no se puede trabajar en conjunto en una construcción colectiva como lo es el Concejo Deliberante. Gobernar no es lograr objetivos personales, si no colectivos. Y a eso nosotros lo entendemos así. El Ejecutivo no».